Besapie extraordinario Año de la Fe

Con motivo de la celebración del año de la Fe el pasado 5 de octubre de 2013 las hermandades y cofradías de San Fernando organizaron una jornada extraordinaria de besamanos y besapies que contó con la respuesta masiva de la ciudadanía. Este carácter extraordinario quedó ejemplificado en La Pastora donde las imágenes de Nuestro Señor Jesucristo en el Huerto, Nuestro Padre Jesús de la Misericordia, Nuestro Padre Jesús del Ecce Homo y las imagen de la Divina Pastora de las Almas se expusieron en devoto y solemne besapie y besamano ofreciendo una imagen no conocida hasta el momento. Ante tal hecho se hizo necesaria la coordinación entre las distintas corporaciones para el montaje y desmontaje de los cuatro altares efímeros que se instalaron. Además también se decidió llevar a cabo un acto de apertura común y cerrar la jornada con una Santa Misa coorganizada por las cuatro hermandades parroquiales.

Tanto desde el Consejo de Hermandades y Cofradías de San Fernando como del Arciprestazgo de la ciudad se enfatizó en el sentido catequético que debía tener esta jornada. Por ello, la Junta de Gobierno de nuestra Hermandad quiso diseñar un altar efímero que sirviera a través de la simbología de los elementos materiales expuestos trasladar a los feligreses dicho mensaje. Para difundirlo se editaron sendos folletos informativos digitales que reproducimos a continuación. Como es lógico, presidió el altar Nuestro Señor Jesucristo en el Huerto que se dispuso sobre el respiradero dorado de su paso de misterio, enmarcado por un dosel elaborado con tela de damasco y galones dorados.

La simbología

La bendita imagen de nuestro Amantísimo Titular quedó escoltada por la luz de cuatro faroles repujados en metal plateados que fueron cedidos para la ocasión por la Hermandad de la Sagrada Cena de Cádiz. Con la presencia de luz se quiso reafirmar la presencia de Cristo ...yo soy la Luz del mundo: el que me siga no caminará en la oscuridad, sino que tendrá la luz de la vida... (Jn 8,12), pero también reafirmamos nuestro compromiso como creyentes transmisores de Fe ...vosotros sois la luz del mundo... brille así vuestra luz delante de los hombres… (Mt 5,14-16). El número total de faroles -seis- venía establecido por el Ritual del Culto Católico que reserva este número para las Solemnidades. 

En un segundo plano más elevado, y escoltada también por dos faroles, se ha colocado la cruz de guía que posee la Hermandad. La cruz es el signo por excelencia del Catolicismo. Es una llamada a vivir la Fe de Cristo ...si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, y tome su cruz, y sígame... (Mt 16, 24). La cruz es el camino a la luz, a la gloria de la Salvación. La aceptación de la cruz es una apuesta por el amor, un sacrificio que tiene su recompensa en la satisfacción personal del verdadero cristiano. Y es que al fin y al cabo la cruz es redentora, símbolo de Esperanza en la superación de la muerte y la Salvación Eterna. 

La Historia

En este acontecimiento extraordinario también se quería hacer un guiño al pasado de nuestra corporación. Es por ello que el altar estaba coronado por la insignia más antigua que posee la Cofradía y que sigue procesionando cada Martes Santo desde hace 65 años abriendo el cortejo procesional. Además, la imagen de Nuestro Señor Jesucristo en el Huerto no se veía alumbrada por faroles desde hacía 45 años, pues fue en 1968 cuando se adquirieron para el paso de misterio de entonces unos candelabros que vinieron a sustituir a los antiguos faroles. Actualmente el paso de misterio también es alumbrado por candelabros.

El exorno floral

El exorno floral elegido para la ocasión fue confeccionado por Floristería Real, siendo donado por una familia de hermanos. La elección de las flores contó con el beneplácito de los miembros de la Comisión de Mayordomía de nuestra corporación y se intentó, dado el carácter extraordinario y el fin formativo de este Devoto Besapie, buscar en el exorno floral cierto simbolismo que pudiera relacionar el paisaje bíblico de la advocación de nuestro Titular con las flores usadas en esta ocasión. Así, la imagen del Señor del Huerto se dispuso sobre un monte compuesto por romero y lentisco, especias propias del clima mediterráneo y por tanto muy probables que estuvieran presentes en Getsemaní junto a los Olivos.

También se emplearon cardos, lirios y rosas. Estas tres flores aparecen unidas en el Antiguo Testamento en el inicio del libro II del Cantar de los Cantares ...Yo soy la rosa de Sarón, Y el lirio de los valles. Como el lirio entre los cardos, es mi amada entre las mujeres... (Cant. 2, 1-2). Para el Catolicismo estos poemas que versan sobre el amor de un hombre y una mujer vienen a enfatizar el amor infinito de Dios hacia nosotros, la Iglesia.

- El cardo por sus características físicas simboliza el sufrimiento; sufrimiento que padeció Jesús mientras oraba postrado en la roca de la Agonía en esos momentos de sacrificio y entrega ante la tentación y la debilidad del Hombre y la grandeza divina de la Misión Redentora que Dios le había encomendado a su Hijo.

- El lirio viene citado en el Sermón de las Montañas ...considerad los lirios del campo, como crecen: no trabajan no hilan... (Mt 6: 28). Nosotros como creyentes ponemos nuestras vidas en manos de Dios a través de la Fe, puesto que si Dios hace florecer las plantas de tal modo, a nosotros sus Hijos nos tiene reservada la Salvación Eterna.

- La rosa roja en la tradición cristiana simboliza las gotas de sangre de Cristo, que brotan al caer éstas en el suelo. Durante el momento pasional de la Sagrada Oración en Getsemaní, Jesucristo llegó a sudar sangre, de ahí que también se quiso que estuvieran presentes en este Altar.